Consumo en los jovenes

Consumo en los jóvenes

 

Con el fin de prevenir el consumo de tabaco entre los jóvenes, deben implementarse o hacerse cumplir regulaciones integrales para reducir la capacidad de compra y la accesibilidad de los productos de tabaco, incluidos los impuestos, la prohibición de publicidad, promoción y patrocinio (TAPS) del tabaco, y la edad mínima legal de venta. Estas normas deben incluir a todos los productos a base de tabaco.

El consumo de cigarrillos es común entre los jóvenes en todo el mundo. Otra grave problema es que los jóvenes de todo el mundo también suelen utilizan otros productos relacionados con el tabaco; como pipas, narguiles, tabaco sin humo o bidis. A decir verdad, en muchos países la prevalencia del uso de estos productos es mayor que la de los cigarrillos, especialmente en Asia Sudoriental, el Mediterráneo Oriental y el África Subsahariana Consumo de tabaco en estudiantes. Estas tasas son aún mayores que las tasas correspondientes en adultos de muchos países. Esto indica que las regulaciones para el consumo de tabaco en adolescentes necesitan incluir a los productos relacionados con el tabaco que no sean cigarrillos, y que se necesita fomentar el conocimiento de sus efectos nocivos.

La mayoría de los fumadores habituales empiezan a fumar antes de los 20 años de edad. Los jóvenes pueden tener varias razones para empezar a consumir tabaco, entre ellas lucir “genial”, “maduro” o “sociable”, o creer que el consumo de tabaco es bueno para lidiar con el estrés y controlar el peso. Los factores que favorecen el inicio en el consumo de tabaco entre los jóvenes pueden variar según los países, pero algunos factores comunes son: el consumo de tabaco por parte de los padres o compañeros; la exposición a la publicidad del tabaco; aceptabilidad del consumo de tabaco entre los compañeros o en las normas sociales promocionadas en películas o en los anuncios publicitarios de tabaco; sufrir de depresión, ansiedad o estrés; una mayor accesibilidad a los productos a base de tabaco y precios más baratos.

La fijación de precios del tabaco y las regulaciones más rigurosas son cruciales para hacer frente a la epidemia del tabaco entre los jóvenes. Los adolescentes son particularmente susceptibles a los precios del tabaco; los precios más altos impiden que muchos de ellos se conviertan en consumidores habituales de tabaco. Las regulaciones para el tabaco también son importantes. Fumar en pipa de agua puede estar exento de la prohibición de fumar en lugares públicos; por ello, tal vez más jóvenes fumen pipas de agua en las reuniones sociales en salones con narguiles (pipas de agua). El porcentaje de fumadores jóvenes que suelen obtener los productos a base de tabaco en una tienda es alta en muchos países, pero se puede reducir prohibiendo la venta de productos a base de tabaco a menores de edad o haciendo cumplir las prohibiciones existentes Compra de cigarrillos. La edad mínima legal para poder comprar productos a base de tabaco en varios países es actualmente 21 años, la cual es más eficaz para reducir la exposición de los jóvenes a los productos a base de tabaco a diferencia del límite de 18 años, vigente en muchos otros países.